Valoración personal  : TIEMPOS DE PRUEBAS : LOS USOS Y ABUSOS DE LA EVALUACIÓN

TIEMPOS DE PRUEBAS : LOS USOS Y ABUSOS DE LA EVALUACIÓN

Antes de dar mi opinión personal acerca del libro leído, quiero justificar su elección. Elegí este libro porque me pareció interesante las críticas que se hacen acerca de los tests de inteligencia u otras pruebas que hoy día se usan de forma muy frecuente en la escuela. Me interesaba mucho tener diferentes perspectivas acerca de la evaluación y enriquecerme de las alternativas prácticas sobre cómo debe plantearse una evaluación, a las que hace referencia Gordon Stobart en su libro.

 

En conclusión, podemos decir que la evaluación tiene un amplio poder, en forma de tests y exámenes, para configurar la manera que tienen las sociedades, los grupos y los individuos de entenderse a sí mismos y de aprender, algo que amerita reflexión y análisis en el contexto de la educación actual, frente a la emergencia de formas de evaluación centradas en competencias laborales, emocionales, ciudadanas, científicas y de emprendimiento, así como de actitudes y habilidades adaptativas al mercado y a la innovación, que claramente están moldeando y afectando la construcción de identidades académicas desde las experiencias educativas formales especialmente.

 

La evaluación no debe de convertir al aprendiz en problema. Los maestros/as tienden notoriamente a explicar el éxito y el fracaso de los niños en relación con unas presuntas capacidades y unos supuestos estilos de aprendizaje, en vez de por las condiciones que hacen que el aprendizaje sea fácil o difícil.

Un aspecto positivo y que comparto con este autor es que los docentes en su enseñanza – aprendizaje deben :

  • Ver el potencial de aprendizaje de todo el alumnado
  • Respetar las diferencias, en vez de clasificar negativamente a los alumnos/as
  • Ser imaginativos en las tareas de e-a

 

En definitiva, este libro ha examinado cómo la evaluación puede crear impresiones engañosas y hacer afirmaciones “grandes y poderosas”.  A lo largo de los ocho capítulos hemos visto como el autor ha tratado de definir el papel correcto y más humilde de la evaluación y de mostrar cómo puede contribuir al aprendizaje. Para ello, es fundamental que las personas cuestionen las etiquetas que otros quieran asignarle y que se responsabilicen de sus propias identidades como aprendices. Vivimos en tiempos de tests, pero no tenemos que estar a su merced.

 

Para terminar quiero señalar una frase de Stobart : “una finalidad clave de la educación, sobre todo en educación, ha sido establecer y elevar los niveles de aprendizaje. Esta es ahora una creencia virtualmente universal: es difícil hallar un país que no esté utilizando la retórica de la necesidad de la evaluación para elevar los niveles en respuesta a los retos de la globalización”.